En el septuagésimo aniversario del Gran Premio de Silverstone, cuya primera edición se remonta a 1948, sólo un piloto inglés es capaz de seguir enloqueciendo a las masas del lugar: Lewis Hamilton. Tras bastantes errores para olvidar, el piloto de McLaren-Mercedes afronta la edición de este año con ilusión, optimismo y fuerzas de superación.
De momento, le gustaría repetir el día de gloria de la clasificación del año pasado, cuando delante de su afición les regaló un primer puesto en la parrilla de salida. El año pasado llegó casi como un regalo; esta vez no desea otra cosa: “Creo que mi primera posición en la parrilla el año pasado fue algo inesperada. Fue una de esas cosas de última hora; uno presiona tan fuerte que el coche estaba en otro mundo. Estaba casi haciendo rali en las curvas, y lo podía sentir: ‘Esta será la vuelta, esta va a ser’. Y crucé la línea y recuerdo que los tipos me dijeron por la radio: ‘Primera posición’, y podía ver a la gente saltando y ondeando las banderas… Y es completamente diferente a cuando se está en otro país.”
Hamilton, de 23 años, no vivió la época en blanco y negro de la Fórmula 1, aunque sus ídolos de niño siguen estando en su mente. Sin tapujos, reconoce que el español Fernando Alonso fue uno de ellos. Ahora, se siente orgulloso de competir contra él y contra Kimi Räikkönen: “No nací hasta 1985, así que para mí, cuando estaba creciendo y cuando empecé a ver Fórmula 1, mis ídolos eran Ayrton Senna, Nigel Mansell y Alain Prost. Y estos tres tipos estaban obviamente en lo más alto entonces. Entonces Michael Schumacher comenzó a dominar y entonces obviamente llegó Kimi, y era un gran fan de Kimi y un gran fan de Fernando. Y aquí estoy ahora, compitiendo contra estos dos pilotos y ocasionalmente ganándoles, así que cuando la gente diga ‘estás viviendo un sueño’ no creo que esa frase le pegue a nadie mejor que a mí.”
Silverstone es una de esas pruebas que siempre están amenazadas por la FIA pero que, irrevocablemente, siempre se celebra. Este año no va a ser menos: un trazado plano, sin casi peraltes ni desniveles, con las abandonadas pistas del aeropuerto como mudos testigos de un pasado demasiado lejano. Un escenario ideal para McLaren y para su piloto estrella. ¿Ganará aquí por primera vez en su país? El deseo de Lewis no es otro, y casi está convencido de ello: “Ganar el Gran Premio Santander de Inglaterra… Creo que será definitivamente el punto culminante de mi carrera. Ganar el gran premio de casa, delante de mi público, sabiendo que hay tanta gente viéndolo… Ganar en Mónaco es muy especial, pero ganar el Gran Premio Santander de Gran Bretaña por primera vez, sabiendo que tengo tanto apoyo y tanta gente pendiente de mí… Tan sólo quiero que los seguidores y patrocinadores sepan que estoy trabajando tan duro como puedo, así que ellos son mi equipo. Estaremos juntos y permaneceremos juntos pase lo que pase. Quiero dar las gracias a todos los por el apoyo.”
Si ya el año pasado su primera posición en parrilla fue enloquecedor, este año puede ser el éxtasis. Lewis necesita reencontrarse con su propio público tras varias carreras realmente vergonzosas, llenas de errores y desatinos. ¿Es este el mejor circuito para resarcirse? Sin duda. Además, la afición siempre da una ventaja extra: “El año pasado en Silverstone fue mi primer gran premio de Fórmula 1, y la cantidad de apoyo que tuve fue increíble. Espero que haya incluso más gente allí este año para apoyarme a mí, a David y a Jenson también. En realidad no es más que un sentimiento de satisfacción, al saber que se compite en casa y que se tiene el apoyo del país; eso da una décima extra por segundo, sólo por la seguridad, así que estoy realmente agradecido por el apoyo que espero tener.”
Pero no sólo la afición cuenta: el equipo ha de mejorar e intentar estar a la altura de Ferrari que, a la postre, se ha mostrado como el equipo más fuerte en lo que llevamos de temporada. Lewis cree que el esfuerzo será mutuo: de él y de su escudería. De esta manera quieren hacerse con la victoria de una manera aplastante, para volver a estar en lo más alto del podio. La idea, además de lograr el mayor número de puntos posible, es hacer vibrar al respetable: “Espero que será muy excitante. Creo que vamos a tener un buen conjunto este fin de semana porque tenemos algunas actualizaciones en breve. Tan sólo espero que el tiempo sea fantástico como el año pasado; era casi como estar en Mónaco, y el ambiente es increíble.”
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